Un despertar a la sanación - Entrevista


Soy mujer, médica, educadora, permacultura y amante de la naturaleza. Me encuentro gestando el proyecto “AlmaVerde, medicinas naturales para la mujer”, donde mi línea de trabajo es nuestro empoderamiento como mujeres a partir de la reconexión con la naturaleza.
¿cómo llegue esta acá?
Egrese de la Universidad Nacional de Córdoba  a fines de 2007. Ya en ese entonces había un par de preguntas que me daban vuelta en la cabeza: ¿lo que hago, realmente crea salud?, ¿somos los médicos exponentes de vida sana? Quería aprender como mantenerme sana y eso no salía en ningún libro.  Entonces  me mude a buenos aires para estudiar en la residencia de Educación y Promoción de la Salud. Trabaje en hospital público pero con la facilidad de salir a escuelas, organizaciones barriales, radio, plazas, etc para hacer campañas y talleres de prevención. Cuando termine no encontré ámbito que me recibiera para desarrollar proyectos. Todos los políticos dicen que prevenir es importante pero muy pocos hacen algo al respecto.  Me ofrecieron trabajar en Chile y allí estuve 3 años. Allá el sistema es muy excluyente, entonces las mujeres se organizaron y empezaron a circular conocimientos de ginecología autogestiva, talleres y círculos de mujeres. El sistema publico tiene integrada y reconocida la medicina Mapuche, sus hierbas medicinales y sus sanadores tradicionales. Allí me conecte con comunidades ecológicas y aprendí sobre huerto medicinal, cultivo orgánico y como vivir respetando la naturaleza y creando armonía, el estilo de vida sustentable que propone la Permacultura.

 ¿En qué consiste la medicina natural para la mujer, y porqué la diferenciación de género?

En medicina todo se organiza según el “enciclopedismo” y las clasificaciones.  Se ha encasillado las dolencias femeninas bajo  la ginecología y obstetricia, y somos mucho mas que eso! No podemos cortar y rotular “esto corresponde al útero” “esto a la mente” “esto a endócrino” “esto a las artes” “eso otro pregúnteselo al especialista”. Esto crea gran frustración y una peregrinaje de un lado a otro en busca de respuestas. El desafío actual es integrar y lograr ver al ser en forma holística.  Y en esta mirada logramos ver que  la mujer  tiene sus especificidades, su manera  particular de enfermar, sanar y su forma de transitar ese camino. El peso de su historia personal y familiar, su entorno, sus emociones, los duelos que atraviesa, el ciclo en el que se encuentra. Son procesos que puedo orientar porque yo misma los vivo como mujer. Por ejemplo es notable la relación entre el desarrollo de miomas, quistes ováricos, endometriosis y los bloqueos en el centro femenino creativo. La vuelta a lo natural es una propuesta que surge de las mismas mujeres y creo que hemos llegado acá por intuición curiosidad (dos cualidades femeninas).

Estamos volviendo, en estos tiempos a los saberes ancestrales para sanarnos?
Totalmente, pero esto no es un retroceso lineal sino un bucle ascendente. Estamos recuperando la herencia humana de memorias y recuerdos de nuestros pueblos antiguos y sus conocimientos locales, que tardaron añares en formarse en cuidadosa observación. Había una cosmovisión de la vida bien profunda, entendiendo las múltiples interrelaciones. Pero yendo no tan atrás, también estamos recuperando los saberes de nuestros abuel@s.

¿Porqué no a los medicamentos químicos?
Porque tenemos la capacidad de ver que es lo mejor para nosotros.
Simplemente nos hemos dado cuenta que no tiene sentido tomar 3 pastillas para mejorar los efectos adversos de otra mas, que además nos resulta cada vez mas cara, a veces ni siquiera nos cura y de la cual soy esclavo porque no se que otra opción tengo. La gente esta muy informada, cada vez mas. Y va descubriendo que tiene la capacidad de tomar decisiones concientes e informadas acerca de si mismo porque en definitiva tenemos la última palabra sobre nuestra propia vida y salud. Esto me alegra mucho. De alguna forma esto es ser cada vez mas libre,

¿Qué papel cumple la alimentación? 
Nutrir es la medicina de la mujer sabia. Hay alimentos que podemos evitar para no tener ciclos dolorosos por ejemplo. Otros que podemos consumir para preparar nuestro cuerpo en su máxima capacidad para recibir una nueva vida. Otros que nos fortalecen y nos hacen sentir vitalidad. Todo al alcance de la mano.

 ¿Cómo redescubrimos nuestro poder femenino?
Redescubrir nuestro poder femenino es  sobretodo un camino de autoconocimiento, autoestima y amor propio. Implica aceptarnos, reconocer y honrar los procesos femeninos. La menstruación y los calores de la menopausia no son una maldición o una enfermedad, como las publicidades nos quieren mostrar. Incluye también tomar decisiones conscientes sobre el manejo de nuestra fertilidad ¿realmente queremos dejar que los laboratorios controlen y mediquen nuestro ciclo? Son preguntas que debemos hacernos.
Esto un camino en construcción, que vamos recorriendo y pintando juntas. No existe una hoja de ruta. Vamos avanzando a medida que cada una logra valorarse, quererse, mirarse con nuevos ojos. Cuando logramos sobreponernos a nuestras limitaciones, sin echar la culpa a nuestra madre, a la abuelita, al patriarcado; tomando responsabilidad de nuestra vida y estando bien presentes, descubriendo la propia fuerza,  talentos, y dones especiales. Todas somos importantes porque con la acción de cada una van despertando hijas, hermanas, amigas. Los círculos de mujeres están trabajando mucho al respecto, desde la igualdad y la sororidad (hermandad). ¿Querés saber como marcha tu poder femenino? Te podés preguntar: ¿tengo necesidad de criticar a las mujeres que son diferentes a mi? ¿Señalar lo que se pone, lo que dice, lo que hace o deja de hacer? Nos hemos estado destruyendo mutuamente como mujeres, en vez de aceptarnos. Si estas segura y en paz con tu naturaleza femenina hay aceptación.

En qué consiste el botiquín natural para la mujer?
El botiquín natural surgió como una forma de compartir mis propios recursos de autocuidado: las esencias que uso, los alimentos, las hierbas medicinales, el compartir las prácticas que voy recuperando y recolectando en mi camino. No solo es una caja con cosas, sino también  nuestra propia “bolsa” de recursos curativos en la que podemos agregar desde una infusión, una tintura medicinal hasta una canción, una meditación, una caminata. Es sobretodo contactar con la propia capacidad de elegir lo que nos hace bien. La mujer siempre ha buscado cuidar a los suyos y ahora esta aprendiendo a auto-cuidarse primero a si misma.

Que me trae el 2016
Tengo muchos planes en gestación: hacer mi huerto en las sierras de Córdoba, organizar encuentros, realizar  talleres, seminarios, retiros, escribir, difundir estos conocimientos. Quiero pronto abrir mi consulta en córdoba, incluso muchos me han pedido sesiones vía skype. Quiero acompañar a las mujeres que están dejando los anticonceptivos hormonales y necesitan capacitarse para planificar su fertilidad de forma natural, también a las que se encuentran con enfermedades uterinas como miomas, quistes y quieren buscar otros enfoques. Muchas tienen períodos muy dolorosos y ya no saben que hacer, otras piden asesoramiento para adoptar la copita menstrual.
En Marzo estaré en Coronel Suarez en Isidoro espacio de arte, con una charla abierta el viernes 4 para celebrarnos como mujeres. Luego el sábado 5 compartiremos el taller de Botiquín natural con medicinas de la tierra y el domingo 6 el espacio formativo sobre nutrición y estilo de vida saludable.

28-1-2016

Gracias al Semanario Reflejos de Pigue por su nota y por darme el espacio de compartir sobre salud, mujer y naturaleza.


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